La piel es uno de los órganos más extensos e importantes presentes en el organismo humano.

El éxito de su función, tanto estética como médicamente depende de diversos factores. Entre estos destaca el cuidado brindado a la misma.

Sin embargo, y teniendo en cuenta lo anterior, existen muchos padecimientos importantes encargados de afectar los tejidos cutáneos. El acné es un ejemplo claro de ello.

Y es que todos los seres humanos cuentan con altas probabilidades de verse afectados por éste.

El acné

Sin duda alguna, de las afecciones que puede presentar la piel, el acné es una de los más comunes y, por consiguiente, muy reconocido.

Hablar sobre este es hacer referencia a pequeñas lesiones de origen cutáneo que pueden ocasionar diversos problemas como:

  • Inflamación
  • Incomodidad
  • Enrojecimiento
  • Dolor

Si bien todos estos hacen referencia a la parte médica, los males de esta no se detienen allí. El acné también puede llegar a desfavorecer la parte emocional de quien lo padece.

Mala autoestima, vergüenza y temor a expresarse en público son los impedimentos más normales.

Lee también: ¿Por qué nos salen granos y cómo prevenirlos?

Más sobre el acné

Más sobre el acné

Aunque cualquier persona puede llegar a experimentar problemas de acné, los más afectados son aquellos encontrados en edades pertenecientes a la pubertad.

En ese caso, no es de sorprenderse por percibir un adulto mayor con algún rastro de este padecimiento.

Este se manifiesta por medio de espinillas negras, quistes, parches inflamados y granos.

Causas del acné

Así como la mayoría de enfermedades, el acné puede aparecer por diversas causas:

  • Sudoración excesiva.
  • Sebo excesivo secretado por las glándulas.
  • Cambios hormonales experimentados en diversas etapas (ya sea pubertad, menstruación, métodos anticonceptivos o embarazo).
  • Ingesta de medicinas (especialmente asociadas con la testosterona y los estrógenos).
  • Mala utilización de productos cosméticos.

Consecuencias del acné

Prevenir el acné

Sumado a los factores ya mencionadas, problemas físicos y emocionales, existen otras consecuencias relevantes a la hora de padecer una enfermedad como el acné.

  • En primer lugar, no todos los individuos suelen experimentarla de la misma manera.
  • En ese orden de ideas, algunos solo perciben un simple y diminuto grano. No obstante, en otros casos los problemas cutáneos son notables.

Tal es la intensidad de esta que, con el paso del tiempo y debido a los granos, la piel experimenta cicatrización exagerada y molesta en la piel.

Alternativas para tratar el acné

1. La alimentación

Esta opción es sencilla de acatar y muy poderosa. Por otra parte, modificar los hábitos alimenticios en pro del bienestar contribuye a la salud del organismo.

Con respecto al acné, existen muchos ingredientes que pueden ayudar en su tratamiento.

Te recomendamos aumentar el consumo de:

  • Vegetales (brócoli, espinaca, tomate, zanahoria)
  • Alfalfa.
  • Maíz.
  • Frijoles.
  • Frutas (pomelo, sandía, guayaba, aguacate)
  • Ácidos grasos omega 3

Los alimentos mencionados son, en su mayoría, excelentes antioxidantes naturales. Además, aportan otro tipo de beneficios para la piel.

Su consumo regular limpia impurezas, combate la acción de los radicales libres y contribuye a la respiración de los tejidos.

2. Remedios naturales

Combatir el acné

Los remedios naturales elaborados en casa son una de las alternativas más utilizadas en el mundo. Estos no pasan de moda, y tienen una gran ventaja: son fáciles de hacer.

Bicarbonato de sodio

Un infaltable en casa. Sin duda alguna, el bicarbonato de sodio es uno de los ingredientes más comunes en diversos remedios hechos en casa y puede ser nuestro gran aliado en esta ocasión.

Ingredientes

  • 1 cucharada de bicarbonato de sodio (10 g)
  • ½ vaso de agua (100 ml)

Preparación

  • Elaborar una pasta con ambos ingredientes y aplícala en las zonas afectadas por el acné.
  • Deja que actúe unos 15 minutos y enjuaga con agua fría.

Visita este artículo: 7 recetas con bicarbonato de sodio para tu rostro

Menta

aceite de menta

La menta se caracteriza por sus propiedades antiinflamatorias. Gracias a estas puede ser un complemento ideal para tratar los granos y las espinillas.

Ingredientes

  • 1 vaso de agua (200 ml)
  • 1 cucharada de hojas de menta (10 g)

Preparación

  • Calienta el agua y, antes de llegar al punto de ebullición, añade el puñado de hojas de menta.
  • Deja que infusione unos 10 o 20 minutos,  para que el agua absorba las propiedades de la planta.
  • Pasado el tiempo indicado, colaremos la infusión y dejaremos que repose hasta alcanzar una temperatura adecuada para aplicarla sobre la piel.

Aplicación

  • Humedece un paño seco con la infusión y aplícalo sobre las zonas afectadas por el acné.
  • Dejar actuar de 10 a 20 minutos antes de retirar con agua fría.

The post 2 maneras de contrarrestar el acné appeared first on Mejor con Salud.