Hablar de violencia en estos “tiempos violentos”, puede parecer retórico, sin embargo, y aunque nuestra capacidad de asombro haya llegado a su límite, los sucesos “cotidianos” aún nos sobrecogen.

Se dice que la realidad es capaz de superar a la ficción, cuando se trata de violencia es muy fácil comprobarlo.

La correspondencia que existe entre realidad y ficción se manifiesta a menudo en el cine, es decir, el cine toma elementos reales para convertirlos en película, al tiempo que aporta situaciones que luego llegan a convertirse en realidad.

Los ejemplos son múltiples, entre los más próximos se encuentra la película de Oliver Stone “Asesinos por naturaleza”; se trata de una grotesca puesta en evidencia de la condición humana, en donde una pareja de amantes recorren varios poblados asesinando a todo ser vivo que se interpone en su camino, después de su, más o menos, largo viaje son capturados por la policía y llevados a prisión, luego de un tiempo de estar encerrados, se lleva a cabo un motín, el fin último es lograr escapar de la cárcel, sin importar quienes y cuantos tengan que morir en el intento.

La cinta presenta una alucinante visión de las zonas más oscuras del ser humano, violencia y sadismo mezclados con el morbo del “gran público”, todo como en la vida real.

Al observar el curso que toma la historia contada en el filme de Stone, podría considerarse que todo es totalmente exagerado, pero luego los acontecimientos reales nos llevan a pensar que lo visto en el cine se ha quedado corto y hasta ingenuo.

Los eventos son narrados como un fluir de conciencia, en donde se mezclan los crímenes de los protagonistas con imágenes artísticas incrustadas como telón de fondo.

Otro filme que trata el tema de la violencia es “La naranja mecánica”, en el Stanley Kubrick realiza un duro, pero fiel retrato de la condición violenta del ser humano; se trata de una película perturbadora, con personajes que parecen estar, en principio, fuera de toda lógica, pero que, en el discurso de la historia, van tomando perfecta forma, es decir, todos forman parte de un complejo sistema de engranajes, que funcionan con la precisión de un reloj.

Los ejemplos pueden seguir, tal es el caso de “Pulp Fiction”, en donde un asesino recita un pasaje de la Biblia antes de disparar contra su víctima, luego el mismo asesino piensa, después de salir ileso de la balacera, que fue el mismo Dios quien bajó del cielo y detuvo las balas.

Todo lo anterior es un claro ejemplo de la condición humana, al final puede quedar la duda, ¿el cine toma los elementos de la realidad o la realidad toma elementos del cine? Lo cierto es que los tiempos son cada vez más violentos.

FERNANDO RAMOS

By fernandoramos

He publicado crítica de cine en Prensa Libre

One thought on “CINENFADO-ASESINOS POR NATURALEZA”
  1. Siempre dejaban un testigo, para que relatara los hechos, y asi poder trascender, en la historia de los asesinos seriales.

    No podemos evocar toda nuestra atencion en la violencia, si no lo mas rescatable de esta pelicula, es la psicologia de los personajes, el que los llevo a cometer dichos actos y su justificacion, esto es manejado con mucha precision y con satira, pero mas bien creo que es una gran realidad de la cultura norteamericana, en la vida cotidiana, es una inmersion a las entrañas del sistema,, es el porque?? de las conductas violentas….

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