Hoy vino a mi mente, el recuerdo de cuando a mi casa llegó el primer radio a transistores y a baterías ( por cierto que costaba el par Q.0.25 ), tenía apenas, si no recuerdo mal, unos 10 años. Mi madre, siendo tan caras las baterías, nos dejaba oír muy poco tiempo, únicamente algo que fuera beneficioso, y el tema religioso lo era, y agradezco la educación cristiana que recibí.

Recuerdo que a escondidas de mi madre escuchaba Chucho el Roto y Kalimán, novelas radiales mexicanas. Y en toda la Semana Santa, esto si con su autorización, me pasaba todo el día y durante toda la semana, escuchando la Pasión de Cristo.

En otros hogares ya existían los televisores en blanco y negro, y para mí eso era una novedad, y a hurtadillas trataba de ver, porque para variar, el hijo del vecino era egoista y trataba por todos los medios que no lo hiciera. Posteriormente a alguien se le ocurrió cobrar para ver la tele, el costo era de Q.0.02 por programa, con media hora de duración. Ahora el problema era conseguir los dos len para ver aunque fuera un programa, para esto había que sacrificarse y no refaccionar en la escuela, eso si escoger la mejor serie para que fueran bien aprovechados.

Ahora la tecnología ha avanzado de tal manera, que la televisión se transmite vía satélite, que las comunicaciones telefónicas que se realizaban a través de un cable que recorría kilómetros de kilómetros, ahora, aunque siguen habiendo comunicaciones por cables, se llevan a cabo con tecnología digital; el celular es un medio de comunicación inalámbrico con cámara fotográfica, acceso a internet, etc.

Tiempos aquellos, por demás inolvidables.

By admin

Algo de programación en Access, diseño web y principalmente electrónica.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *